
Pilar me ha pedido que os diga que os agradece todas las muestras de cariño, el apoyo que le estáis brindando, y todos vuestros comentarios tan llenos de energía positiva.
Hay citas en la vida que son ineludibles, la vida y la muerte. Una trae mucha alegría y la otra, por lo general, lo contrario.
Como sabéis soy médium, sirvo de enlace entre los seres que se han ido y los que están aquí, transmitiendo sus mensajes. Estoy de algún modo, acostumbrada a situaciones duras y complicadas pero esta vez es diferente. Estoy viviendo dos situaciones al mismo tiempo, una como amiga y otra como médium, aprendiendo mucho de ambas.
Mi amiga Pilar está en esta situación, en fase terminal con metástasis y quería hablaros de cómo está llevando este proceso. Es una persona muy especial, generosa y que le gusta vivir la vida plenamente, tanto lo bueno como lo malo. Suele decir que no hay nada malo, sino situaciones que aún no comprendemos ni sabemos adonde nos llevan pero que todo lo que nos ocurre es para y por nuestro bien. En el caso de su próxima muerte, está actuando de la misma manera.
Hace unos días, invitó a comer a sus amigas. Eramos once y disfrutamos mucho. Era su manera de despedirse de nosotras. Fue todo alegría, risas. Este sábado pasado fue su cumpleaños y quería celebrarlo con su familia. Ella fue ingresada en un centro hospitalario en el que continua, y tuvo la oportunidad de despedirse también de su familia. Se que hubo momentos muy intensos, de dolor y tristeza, de no aceptación de su marcha, pero al final pudieron hablar de todo lo que necesitaban y se quedaron con mucha paz.
En mi caso, estoy viviendo este proceso desde dos perspectivas. La primera como amiga, escuchando y aprendiendo todos los días de su coraje, de su alegría, de su aceptación ante la llegada inminente de su final. Por otra, desde mi trabajo como canalizadora y médium. Hemos vivido momentos muy bonitos en los que sus guías le comunicaban cómo sería su tránsito, quiénes estaban, están y estarán con ella durante su muerte; le han dado datos y mostrado imágenes. La mayoría de los mensajes son muy amorosos, envolventes y muy dulces, tiernos, llenos de paz y calma. En ellos ya hay una preparación para cuando llegue el momento.
Hasta ahora en mi trabajo, los mensajes que había dado en estos casos era de personas que ya habían fallecido a sus seres queridos. En esta ocasión, he tenido el privilegio de ser testigo de otro tipo de comunicación, la que nuestros guías y seres queridos nos brindan para ayudarnos a dar este paso tan importante.
Aunque es duro hablar directamente de la muerte a una persona que sabe que ésta va a llegar de manera muy próxima; por otro lado es muy gratificante el poder hacerlo abiertamente, sin tapujos, llamando a las cosas por su nombre. Esto nos ha permitido expresarnos desde el corazón, viviendo la alegría de su marcha y a la vez, el dolor y vacío que dejará al irse. Son las contradicciones que tenemos como seres humanos.
Le comentaba a Pilar que era una gozada poder hablar con ella claramente, escucharle al decir cómo había dejado todo preparado, hasta la música que quiere que se escuche, el amor eterno de Santa Teresa de Jesús, cuando se esparzan sus cenizas en plena naturaleza.
Hoy hemos hablado del dolor, me comentaba que a veces siente una opresión en el cerebro debido a un edema. Se lo había comentado a su médico y le había dicho que podían darle alguna medicación. Ella no quiere nada. Quiere ser y estar consciente de todo lo que ocurra durante este proceso y mientras el dolor no pueda con ella, evitará cualquier interferencia que le reste consciencia.
En ningún momento deja de sonreír. Aunque su cuerpo se va encogiendo por el cáncer, notas que su ser crece. Percibes su serenidad, su calma y tranquilidad. Me decía, que a veces se pregunta si es real su paz o es fruto de su imaginación, pero ella misma se respondía al decir que no se puede fingir todo el rato y que habla desde el corazón. No tiene que ser fácil saber y sentir que este momento va llegando y a la vez, sonreír y dar ánimos a los demás.
Siempre he aprendido mucho y lo sigo haciendo a su lado, pero estos días están siendo muy especiales, muy intensos y muy gratos. Se que sentiré una profunda tristeza cuando se vaya pero a la vez, se que estará en un lugar mejor, rodeada de los suyos, disfrutando de mucha felicidad y amor, y todo ello, hará que me sienta muy feliz por ella.
Además, como ella me dice, nos veremos muy pronto. Tú estarás en este plano y yo te hablaré desde el otro. Por tu trabajo, sabes como son estas cosas. Y nos reímos.
Le he pedido permiso para poder contaros todo este proceso y ella me ha dicho que escribiera todo lo que quisiera, pues estamos para compartir y si su historia pudiera ayudar a alguien, sería estupendo. Así que siguiendo sus palabras, aquí estamos compartiendo nuestra experiencia.
La imagen de la foto está sacada de internet. Aparentemente no tiene copyright.